El inicio del curso escolar: Tips para los primeros días
Nos acercamos a una fecha muy señalada en el calendario, el comienzo del curso escolar por primera vez para mucho de nuestro alumnado. Se trata de uno de los cambios más importantes en la vida de los/as más peques, separase de su familia, salir de su hogar y pasar el día con unos/as adultos en un ambiente desconocido.
Este gran cambio va a introducir en el/la menor nuevas rutinas, nuevas relaciones más allá del entorno familias y un nuevo espacio donde desenvolverse. Se trata, por tanto, de un gran paso, que al principio puede ser un poco estresante, pero que poco a poco irán asimilando.
El proceso de adaptación es importante porque en las escuelas infantiles, niños y niñas experimentan el hecho de ganar la seguridad y confianza, que ya tienen en casa, mediante un proceso gradual. Este trabajo permite que, a largo plazo, puedan desarrollar su propia sostenibilidad y autonomía.
Consejos a seguir los primeros días:
Estad tranquilos/as y seguros/as: el mejor regalo que les podéis hacer el primer día es estar tranquilos/as. Los/as niños/as son muy sensibles a las emociones, y son capaces de notarlas, aunque disimulemos, así que demostradles que estáis seguros y que tenéis confianza en que habéis elegido la mejor escuela para ellos/as.
Despedíos de vuestros hijos: Siempre, siempre, siempre debéis despediros de ellos, deben saber que os tenéis que ir. Decidles cuándo los/as iréis a buscar, con referencia a algún acontecimiento (por ejemplo, ’después de la comida te vengo a buscar’). Ellos/as aún no tienen sentido del tiempo, pero las rutinas hacen que sepan lo que va a suceder en cada momento.
Despedidas cortas: Haced de la despedida algo corto. Alargar la situación les puede confundir, breve y con alegría.
Sabed que el llanto es normal: que los/as peques lloren los primeros días es normal. Lo más habitual es que el primer día se la pasen llorando a ratos, y poco a poco vayan reduciendo ese tiempo hasta estar completamente felices.
Evitad frases negativas como: ‘no llores que mamá se va triste’, ‘ay pobre que le dejamos solito’, ‘¿qué te han hecho?’, etc. El mensaje que reciben ellos/as es de negatividad, y lo que buscamos es que sea una experiencia positiva.
Evitad introducir más cambios: la entrada en la escuela supone ya un cambio muy importante en sus vidas, por lo que empezar con otros cambios tales como quitar el pañal, quitar el chupete, cambios en la alimentación, etc. pueden dificultar la adaptación. Es mejor esperar un poco, una vez estén adaptados.
Lo más importante, es mostrarle vuestra felicidad y ganas, tantas como tenemos nosotras de tenerlos/as en el centro.